Este artículo puede contener enlaces de afiliación, consulta los detalles aquí.
Este blog cumple hoy exactamente un año. El 1 de marzo de 2019 Gastronomadistas veía la luz desde Chiang Mai, Tailandia, después de unos meses intensos de formación y planificación previa.
Para los que no me conozcáis, me llamo Eva y soy la autora de este espacio, una bitácora de gastronomía para viajeros. Éstos fueron algunos de los artículos que publiqué tal día como hoy de 2019:
- una introducción a la gastronomía tailandesa
- una oda a la mejor salchicha del mundo: la sai oua
- este artículo sobre la sopa más preciada del norte de Tailandia: el khao soi.
Escribo este blog porque, cuando visito un lugar, no soporto la idea de quedarme sin probar algo esencial y tampoco soporto la idea de que a ti te pase lo mismo.
El blog como negocio: ¿he conseguido vivir del blog en un año?
No pienso andarme por las ramas: en un año no he conseguido «vivir del blog» ni nada que se le parezca. Cierto es que he dado prioridad a la creación de contenido vs. implementar estrategias de monetización, pero no importa: con el número de visitas que tengo en la actualidad es imposible vivir de ello. Esta es la realidad.
Empecé hace unos meses con el marketing de afiliación pero los únicos resultados obtenidos son una sola comisión de 4 euros (comisión que me fundí esa misma noche para celebrarlo).
No obstante, si echo la vista atrás no puedo por menos que sentirme orgullosa, el blog se parece muchísimo a lo que me había imaginado: refleja lo que me gusta, no está influenciado por nada ni nadie y las recomendaciones que en él aparecen están ahí porque de verdad creo que deben estar ahí. Creo que voy por el buen camino.
Pero si me preguntas a día de hoy: ¿se puede vivir de un blog? Mi respuesta es NO (hasta nueva orden).
Vivir de un blog: dificultades específicas de Gastronomadistas
Mis circunstancias y mi experiencia son sólo eso, las mías. Te las cuento por si pueden servirte como referencia.
Gastronomadistas es un blog de gastronomía viajera, eso significa que no encaja muy bien en ningún lado: no es un blog de viajes pero tampoco es un blog de cocina. Mis lectores, por lo tanto, son una mezcla de personas interesadas en los viajes y en la gastronomía.
Éstos no llegan a mí durante los preparativos del viaje (como es el caso de la mayoría de blogs de viaje) sino cuando ya están en el sitio y buscan para comer. Eso limita muchísimo los productos y servicios que puedo recomendar sin salirme de mi nicho.
Como no están previstas las «colaboraciones» con restaurantes (por lo de no condicionar mi opinión), las oportunidades de obtener ingresos se reducen bastante al verse también reducida mi exposición.
Y hasta aquí los retos específicos de Gastronomadistas.
El blog como negocio: consejos y lecciones de este primer año
1. No lo hagas por dinero
Ha quedado claro, ¿no?
2. El verdadero protagonista de tu blog
Cuidado con convertirte en “ego-blogger”. Sí, tu personalidad debe impregnarlo todo, pero el verdadero protagonista del blog es SIEMPRE el lector. Querer ayudar/informar/entretener a tus lectores debe ser tu prioridad y tenerlo claro será decisivo a la hora de tomar decisiones.
3. No subestimes el tiempo y el esfuerzo que lleva crear y mantener un blog
A no ser que puedas delegar ciertas tareas, tendrás que aprender y hacerlo todo tú. Éstas son sólo algunas de las competencias que he aprendido o estoy aprendiendo: WordPress, SEO, fotografía, copywriting, márketing de afiliados, redes sociales, Facebook ads, etc.
4. Elige una temática que te apasione
Si no lo haces, será un verdadero suplicio echarle las horas que le vas a tener que echar. Si tu blog es sobre algo en lo que ya tienes experiencia tienes mucho ganado: podrás centrarte en aprender todas esas habilidades que he mencionado antes.
5. No hay dos blogs iguales
Por lo tanto no existe una fórmula mágica de monetización que funcione para todos. Miente quién te diga lo contrario.
Deberás averiguar cuáles son las que te funcionan, centrarte en ellas y encontrar «tu equilibrio» (sigo en ello un año después).
6. Los afortunados que viven de su blog son una pequeña minoría
No viven «del blog»: viven de oportunidades que éste les ha brindado o de la creación y venta de info-productos. Pero realidad es que la mayoría de bloggers siguen conservando su trabajo habitual, siendo el blog tan solo un hobbie y/o una fuente de ingresos extra.
7. No seas cutre: invierte en tu blog
Sí, se puede empezar un blog de forma prácticamente gratuita, pero a la larga te limitará. ¿Dónde me he gastado yo más dinero? Pues creo que en formación online. Si no he gastado casi nada en formación presencial es porque me apunto a todos los cursos gratuitos que puedo, seguro que en tu provincia también los ofrecen.
Una cosa es cierta: comparado con otros negocios la inversión es mínima, per aún así deberás hacerte esta pregunta: ¿tienes el dinero necesario para mantenerte hasta que el blog genere ingresos?
8. ¡El SEO funciona!
Son varios los artículos que he conseguido colocar arriba en los resultados de Google y la verdad que mola ver ese esfuerzo recompensado. Eso sí: el SEO sin el número de visitas adecuado no será suficiente para generar ingresos, pero es el primer paso.
9. No dejes tu trabajo
Repito: no dejes tu trabajo a no ser que tengas dinero ahorrado (es imposible dar una estimación, cada caso es diferente) o una forma de financiación que te permita hacerlo.
La financiación para Gastronomadistas proviene de mis ahorros y de la capitalización de la prestación por desempleo (el llamado «pago único»).
10. El verdadero reto de la personalidad
Mostrarse auténtico puede resultar difícil pero conjugar esa autenticidad con el SEO es hacer encaje de bolillos. Hay bloggers que ni lo intentan: se centran en el SEO y sus artículos acaba pareciendo escritos por un robot…
Prueba a alternar artículos más auténticos con otros más orientados a posicionar pero, por favor, olvídate de los artículos sin sustancia que inundan la red: no necesitamos más.
Y ya está, esto es lo que puedo aportar de este primer año. ¿Estás pensando empezar un blog y tienes alguna duda? Házmela llegar en un comentario y haré lo posible por resolverla.
¡Muchísimas gracias por estar ahí!
Un abrazo,
Eva
Este artículo puede contener enlaces de afiliación, consulta los detalles aquí.